Guillermo Bocanegra …círculo de tierra roja… Producción independiente
Mayo de 2009 / Revista Acontratiempo / N° 13
El guitarrista colombiano Guillermo Bocanegra nos sorprende con un trabajo fonográfico que tiene como una de sus principales virtudes la exquisita selección del repertorio. La producción incluye obras, temporalmente cercanas, de 1968 hasta el 2004, de los compositores César Guerra Peixe (1913-1972), Adina Izarra (1989- ), Leo Brower (1939- ), Rodolfo Acosta R. (1970- ), Martín Vigil (1976- ), y la notable aparición del guitarrista como compositor.
Bocanegra mantiene su interés en las músicas contemporáneas del continente por convicciones en cuanto a la prelación que estas obras merecen en nuestro contexto, pero especialmente por su eparticular capacidad para la ejecución de estas piezas de tanta exigencia técnica y profundidad interpretativa.
La producción inicia con los Preludios del compositor brasileño Guerra Peixe. En ellos, Bocanegra recurre a su lograda claridad para el balance entre la suficiencia técnica y la emocionalidad del contenido para salvaguardar la indispensable capacidad comunicativa y sensible de su interpretación en esta obra. El control dinámico y la precisa articulación de los numerosos fragmentos arpegiados son descollantes.
El álbum prosigue con una obra de hermoso título pictórico: Desde una ventana con loros, de la venezolana Izarra. La interpretación resulta sobresaliente por la limpieza de la ejecución, en una obra que exige de sí extremo control y conocimiento por su delicado desarrollo y sutil contrastación de sus partes.Audio 1: Izarra
La curva del álbum, indudablemente premeditada, sucede con el Paisaje cubano con campanas, del reconocido compositor cubano Leo Brower. La pieza, de alta exigencia en cuanto a la fuerte contrastación de sus partes y técnicas involucradas, es interpretada con una solvencia técnico-interpretativa superior. Probablemente en este corte demuestre Bocanegra, con mayor claridad, una cota de dominio técnico-interpretativo comparable a la de muy pocos instrumentistas, especialistas en este repertorio, dentro del contexto iberoamericano.
Se continúa la escucha del álbum con la sorprendente Bolón Cabán, de Guillermo Bocanegra. La obra cuenta con una madurez sinceramente imprevista, considerando que pareciera provenir de un compositor con largo oficio. El conocimiento de las posibilidades sonoras del instrumento favorece la creación de Bocanegra. Sin embargo, hay más: no es una obra que se concibe para la exhibición de la habilidad técnica; por el contrario, es sobria y equilibrada. Su empleo del silencio, la pausa, la resonancia y la fuerte contrastación piano-forte son propias de una composición guiada por los criterios impuestos por el concepto y el material, no por el ego del intérprete.
La producción continúa con la obra que da nombre al álbum; …círculo de tierra roja… Imagen 1 del bogotano Rodolfo Acosta Restrepo. En cuanto la obra, se verifica la inteligente inclusión y desarrollo de las sonoridades que conduce al amplio y diverso universo textural característico de las obras de este compositor. Igualmente se incorpora de manera magistral la preocupación de Acosta por establecer un diálogo estético con los creadores latinoamericanos contemporáneos, el cual ha tenido como antecedente sus obras sobre el pintor Torres García, el escultor Ramírez Villamizar, entre otros; en este caso continúa con el escritor Jairo Aníbal Niño. Este esfuerzo de Acosta es uno de los procesos más interesantes desarrollado por nuestros compositores actuales en cuanto la puesta en relación de la música y el arte latinoamericanos en términos de detallado y riguroso análisis para la imaginativa y sugerente creación musical. La interpretación de las obras para guitarra de Acosta son siempre exigentes; la ejecución precisa y profunda en convicción hace evidente la proximidad entre el intérprete y el compositor en el abordaje de la obra. Audio 2: Acosta
El álbum cierra con la poética Kanuvv, del compositor argentino Martín Vigil. El juego de segmentos musicales: acordes, arpegios, en contrapunto con el juego de la prosa propuesto por el texto, son un momento emocionante y profundo, perfecto para el cierre de la experiencia de escucha. Bocanegra interpreta con indudable belleza las partes de guitarra mientras que su voz, sincera, nos conmueve.
…círculo de tierra roja… es una celebración, no sólo para los amantes de aquella música valerosa que nos insiste en la belleza del amplio mundo de todos los sonidos y de las infinitas formas de hacer el arte de la música; es una especial alegría para la plenitud de la poesía que la música es capaz de proponer; y una voz de aliento para quienes persisten en la búsqueda vital y profunda de Latinoamérica.
Bocanegra mantiene su interés en las músicas contemporáneas del continente por convicciones en cuanto a la prelación que estas obras merecen en nuestro contexto, pero especialmente por su eparticular capacidad para la ejecución de estas piezas de tanta exigencia técnica y profundidad interpretativa.
La producción inicia con los Preludios del compositor brasileño Guerra Peixe. En ellos, Bocanegra recurre a su lograda claridad para el balance entre la suficiencia técnica y la emocionalidad del contenido para salvaguardar la indispensable capacidad comunicativa y sensible de su interpretación en esta obra. El control dinámico y la precisa articulación de los numerosos fragmentos arpegiados son descollantes.
El álbum prosigue con una obra de hermoso título pictórico: Desde una ventana con loros, de la venezolana Izarra. La interpretación resulta sobresaliente por la limpieza de la ejecución, en una obra que exige de sí extremo control y conocimiento por su delicado desarrollo y sutil contrastación de sus partes.Audio 1: Izarra
La curva del álbum, indudablemente premeditada, sucede con el Paisaje cubano con campanas, del reconocido compositor cubano Leo Brower. La pieza, de alta exigencia en cuanto a la fuerte contrastación de sus partes y técnicas involucradas, es interpretada con una solvencia técnico-interpretativa superior. Probablemente en este corte demuestre Bocanegra, con mayor claridad, una cota de dominio técnico-interpretativo comparable a la de muy pocos instrumentistas, especialistas en este repertorio, dentro del contexto iberoamericano.
Se continúa la escucha del álbum con la sorprendente Bolón Cabán, de Guillermo Bocanegra. La obra cuenta con una madurez sinceramente imprevista, considerando que pareciera provenir de un compositor con largo oficio. El conocimiento de las posibilidades sonoras del instrumento favorece la creación de Bocanegra. Sin embargo, hay más: no es una obra que se concibe para la exhibición de la habilidad técnica; por el contrario, es sobria y equilibrada. Su empleo del silencio, la pausa, la resonancia y la fuerte contrastación piano-forte son propias de una composición guiada por los criterios impuestos por el concepto y el material, no por el ego del intérprete.
La producción continúa con la obra que da nombre al álbum; …círculo de tierra roja… Imagen 1 del bogotano Rodolfo Acosta Restrepo. En cuanto la obra, se verifica la inteligente inclusión y desarrollo de las sonoridades que conduce al amplio y diverso universo textural característico de las obras de este compositor. Igualmente se incorpora de manera magistral la preocupación de Acosta por establecer un diálogo estético con los creadores latinoamericanos contemporáneos, el cual ha tenido como antecedente sus obras sobre el pintor Torres García, el escultor Ramírez Villamizar, entre otros; en este caso continúa con el escritor Jairo Aníbal Niño. Este esfuerzo de Acosta es uno de los procesos más interesantes desarrollado por nuestros compositores actuales en cuanto la puesta en relación de la música y el arte latinoamericanos en términos de detallado y riguroso análisis para la imaginativa y sugerente creación musical. La interpretación de las obras para guitarra de Acosta son siempre exigentes; la ejecución precisa y profunda en convicción hace evidente la proximidad entre el intérprete y el compositor en el abordaje de la obra. Audio 2: Acosta
El álbum cierra con la poética Kanuvv, del compositor argentino Martín Vigil. El juego de segmentos musicales: acordes, arpegios, en contrapunto con el juego de la prosa propuesto por el texto, son un momento emocionante y profundo, perfecto para el cierre de la experiencia de escucha. Bocanegra interpreta con indudable belleza las partes de guitarra mientras que su voz, sincera, nos conmueve.
…círculo de tierra roja… es una celebración, no sólo para los amantes de aquella música valerosa que nos insiste en la belleza del amplio mundo de todos los sonidos y de las infinitas formas de hacer el arte de la música; es una especial alegría para la plenitud de la poesía que la música es capaz de proponer; y una voz de aliento para quienes persisten en la búsqueda vital y profunda de Latinoamérica.