El transepto cultural de una tradición musical
El trabajo de investigación realizado por la docente de la Universidad del Cauca, Paloma Muñoz, quien recorrió diferentes regiones del departamento del Cauca, se ve hoy reflejado en el documento audiovisual “Violines de negros”.
Esta producción, da a conocer el importante hallazgo de una arraigada tradición musical en las comunidades afro descendientes, quienes han mantenido la interpretación de violines al ritmo de fugas, bundes, torbellinos negros, entre otros.
Tal tradición, se halla en un largo recorrido, pues atraviesa el departamento de norte a sur (pasa por los municipios de Puerto Tejada, Santander de Quilichao, Caloto, Buenos Aires, Suárez, Cajibío, El Tambo, Popayán, Mercaderes, Valle del Patía), lo cual es denominado por la investigadora como transepto cultural.
En las regiones mencionadas, puede apreciarse cómo las generaciones actuales han asimilado el uso de un instrumento europeo, gracias a la imitación que los pobladores esclavos hicieron durante la época de evangelización, donde los españoles interpretaban violines y otros instrumentos para la música sacra y religiosa. De tal suerte, los esclavos heredaron un instrumento con el cual buscaron interpretar melodías, cuyos orígenes eran africanos.
Por
todo ello, el departamento del Cauca es representado hoy, no sólo por
la música de marimba en el Pacífico o de Chirimías en la región
andina, sino también por las melodías de estos violines negros que,
en tonalidades de La Mayor, nos recuerdan nuestro origen heterogéneo.